Los salarios por fin están despegando. Lo curioso es que lo hacen precisamente en una economía en plena desaceleración. Resulta cuanto menos curioso que los ingresos de los trabajadores estén experimentando el mayor alza de la última década al mismo tiempo que el PIB se ralentiza y el mercado laboral reduce su ritmo de crecimiento a niveles de la crisis. No obstante, cabe destacar que las remuneraciones van por detrás, es decir, que perciben más tarde los efectos de la economía, ya sea para bien o para mal. De hecho, han necesitado cinco años de recuperación económica para que ésta se note en los bolsillos de los ciudadanos. Y ahora, cuando ya se sienten los efectos de una posible recesión a nivel mundial, resisten. Por el momento.
Así, los sueldos pactados por convenio para este 2019 y que afectan a más de 8,6 millones de trabajadores se han elevado un 2,29%, bastante por encima tanto de la revalorización del 1,6% que aprobó el Gobierno para las pensiones como de los precios, que han subido de media un 0,77% en lo que va de año e incluso si se toma el último dato de la inflación, se han elevado apenas una décima, según el Ministerio de Trabajo. Esto significa que por lo menos los salarios han recuperado un punto y medio de poder de compra, después de años de contención e incluso devaluación. Se trata, además, del mayor incremento desde 2008, antes de que estallara la crisis, cuando se impulsaron un 3,6%.
Precisamente a este nivel se aproximan las remuneraciones de los trabajadores afectados por los convenios colectivos que se han firmado ya en este 2019 (cabe recordar que en muchas ocasiones los convenios se firman por varios años, por lo que la mayor parte de los trabajadores se rigen por incrementos ya pactados en ejercicios anteriores). Los 619 convenios suscritos del 1 de enero al 30 de septiembre y que afectan a más de 1,4 millones de personas reflejan un alza salarial del 3,52%.
Y es que este cambio de tendencia ya se evidenciaba en la segunda mitad de 2018, pero se confirma con claridad en este año. No cabe duda de que detrás de este comportamiento está el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que se firmó el 5 de julio de 2018 y recomendó subir los salarios entre el 2% y el 3%, esto es, un incremento fijo en el entorno del 2% y otro variable del 1% ligado a la productividad. La realidad se sitúa más en la horquilla baja, de momento, aunque se espera una «mejora similar» para el resto de convenios que faltan por firmar, según CC OO.
Sin embargo, la mayor parte de trabajadores ni siquiera llegan al mínimo pactado por los sindicatos y la patronal en dicho acuerdo, puesto que más de un tercio de los ocupados regidos por un convenio colectivo (un 35,7%) han tenido un alza salarial de entre el 1,5% y el 2%. Más de tres millones de personas. E incluso es inferior para una cuarta parte, para más de 2,1 millones de trabajadores, cuya subida se quedó entre el 1% y el 1,5%. Otro 22% tuvo un alza de entre el 2% y el 2,5%, mientras que apenas uno de cada diez trabajadores cubiertos por convenio ha logrado sobrepasar el 3%.
De este modo, hay un total de 3.140 convenios con efectos económicos conocidos y registrados para 2019, que afectan a 967.904 empresas y 8.609.808 trabajadores, lo que significa que el 81,2% de los ocupados ya tienen pactadas sus condiciones. Estas cifras implican un mayor ritmo en la negociación que en años anteriores.
El alza es más favorable para los convenios sectoriales, un 2,3%, mientras que los de empresa se reducen al 1,9%. Sin embargo, la subida supera un 3,1% en el caso de las empresas públicas, en línea con el proceso de recuperación salarial tras los recortes aplicados a los empleados públicos durante la crisis.
Por sectores de actividad, los servicios, donde se concentran más trabajadores, registran la mayor variación al rozar el 2,5%, seguidos por la construcción (2,26%), la industria (1,93%) y el sector agrario (1,69%).
[Publicado El Correo, 27/10/2019]
Laboral
2 diciembre, 2019