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El Gobierno vasco promete las ayudas al contrato de relevo para abril

Las subvenciones de 6.000 euros por trabajador se aplicarán con efecto retroactivo desde el 1 de enero

Las ayudas del Gobierno de Iñigo Urkullu para incentivar el contrato de relevo en las empresas vascas se pondrán en marcha a mediados del mes de abril. Así lo ha asegurado a EL CORREO un portavoz del departamento de Empleo, que dirige Ángel Toña, quien recordó que las subvenciones de 6.000 euros por cada contrato formalizado tendrán carácter retroactivo y se aplicarán a los suscritos por las empresas desde el 1 de enero de este año. El Ejecutivo mantiene los plazos manejados hasta la fecha y atribuye a la complejidad burocrática de esta y otras medidas aprobadas en la Mesa de Diálogo Social la tardanza en ponerlas en marcha.

Como se recordará, el sindicato CC OO de Euskadi anunció la pasada semana su decisión de retirarse del foro de diálogo que comparte con UGT, la patronal Confebak y la Administración, ante la tardanza de la puesta en marcha de los acuerdos alcanzados en el mismo y hasta que se cumplieran. La iniciativa de la central de Unai Sordo amenaza con ensombrecer el final de la presente legislatura, en la que desde el arranque el lehendakari Urkullu hizo bandera de la recuperación del diálogo social, pese a la negativa de la mayoría sindical -ELA y LAB- a acudir a esa mesa por considerarla poco útil. La retirada de la segunda central vasca del foro lo dejaría en una delicada situación, máxime cuando ya nació cojo por la ausencia de las centrales nacionalistas.

El plan de apoyo institucional al contrato de relevo, dotado con 5,5 millones de euros para dos años, incluyó la pasada semana un nuevo requisito para las empresas que quieran recibir la ayuda del Ejecutivo. Se trata de que los trabajadores relevistas han de tener una retribución mínima de 12.000 euros anuales, lo cual supone que la subvención total no podrá superar nunca el 50% del salario de un año del empleado contratado.

Más difícil

Esta fórmula de rejuvenecimiento de las plantillas de las empresas ha sido muy utilizada en Euskadi desde su puesta en marcha a finales del pasado siglo -es la comunidad que más intensamente la ha usado-, pero el endurecimiento de los requisitos para aplicarla ha reducido de forma drástica su utilización, una circunstancia que se agravará aún más en los próximos años dadas las medidas que se están aplicando. Por todo ello, las ayudas pactadas en la Mesa de Diálogo Social permitirían, según esperan patronal y sindicatos, hacerlo de nuevo atractivo para las empresas.

Los datos de los Servicios Públicos de Empleo revelan que en los dos primeros meses del año 233 trabajadores ya han suscrito contratos de relevo en el País Vasco, aunque es previsible que tan solo una parte de ellos cumpla los requisitos específicos fijados en la Mesa de Diálogo Social.

Aparte de las condiciones para ponerlo en marcha fijadas por la regulación nacional, para poder acceder a los 6.000 euros de subvención en Euskadi será necesario, entre otras cosas, que el trabajador relevista tenga menos de 30 años, suscriba un contrato indefinido -o temporal si antes de 20 meses es convertido en fijo-, a jornada completa y que no haya tenido un empleo fijo en los seis meses anteriores. Además, ha de estar inscrito como desempleado en Lanbide, o ser trabajador temporal en la empresa y ser sustituido, a su vez, por otro en paro.

El contrato de relevo se puede aplicar para sustituir a un trabajador que tenga cuatro años menos que la edad ordinaria de jubilación, que este año es de 61 años y 4 meses. No obstante, hay aún una vía abierta para utilizarlo a los 61 años y, así mismo, aplicar el resto de las antiguas condiciones hasta el 1 de enero de 2019. Se trata de las empresas que tenían con sus trabajadores un compromiso previo al 1 de abril de 2013 para utilizar la jubilación anticipada por contrato de relevo, que les permite seguir aplicando la vieja normativa a los empleados nacidos antes de 1958.

Otros acuerdos

Por otro lado, queda pendiente aún la aplicación del acuerdo sobre la construcción, con incentivos a la rehabilitación de edificios dirigida al ahorro energético, que conlleve programas de formación y ayudas para desempleados, así como incentivos para las empresas que contraten a quienes hayan finalizado la formación, y para las comunidades de vecinos que se acojan al programa. En este caso, la tardanza en ponerlo en marcha se debe a las consultas realizadas a las autoridades de la Competencia, dados los requisitos que se exigen a las empresas. La Mesa de Diálogo Social, indicó Maribel Ballesteros, de UGT- Euskadi, está pendiente aún de la respuesta.

El Gobierno vasco espera también para mediados de abril la puesta en marcha del programa de primera oportunidad de empleo para los jóvenes, que también forma parte de los acuerdos del foro de diálogo social, aunque está integrado en los planes vascos de empleo.