Muchas mujeres han renunciado a una trayectoria profesional brillante por sus hijos. De hecho, prácticamente seis de cada diez ha dicho no a algunos trabajos por considerarlos incompatibles con su vida familiar, según un informe publicado esta semana por el IESE.
Más de la mitad afirma que ser madre le ha impedido una mayor proyección profesional y el 46% asegura que ha tenido que trabajar mucho más duro para demostrar su valía, según el citado estudio. Nada nuevo en un mercado laboral en el que las mujeres reciben casi un 20% menos de sueldo que los hombres, según datos de Eurostat.
Esta diferencia salarial acaba repercutiendo en las pensiones. Así, de media las mujeres cobran 776 euros al mes de jubilación, mientras que la de los hombres asciende a 1.229. Para reconocer la contribución demográfica de las madres trabajadoras y corregir en cierta medida esta brecha económica, el Gobierno puso en marcha el 1 de enero de 2016 el complemento de maternidad, del que disfrutan ya 211.843 mujeres con dos o más hijos. Esto supone que casi seis de cada diez nuevas pensionistas se benefician de este complemento que ha incrementado de media estas prestaciones en 56 euros al mes.
[Publicado El Correo, 7 de mayo de 2017]
Laboral
18 mayo, 2017